El PRP se obtiene mediante la extracción de sangre, que luego se centrifuga para aislar las plaquetas con factores de crecimiento. Esto favorece la formación de nuevos vasos sanguíneos, lo que incrementa el flujo sanguíneo y mejora la oxigenación y nutrición de la piel. Como resultado, se estimula la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico, ralentizando el envejecimiento y brindando un efecto más natural y prolongado.
¿Qué es?
El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es un tratamiento estético que utiliza los propios componentes de tu sangre para estimular la regeneración celular y la producción de colágeno de forma natural en áreas específicas, favoreciendo así la capacidad natural del cuerpo para regenerarse.
¿Para qué sirve?
Es ideal para mejorar la calidad y textura de la piel, reducir líneas finas de expresión, tratar la flacidez leve, cicatrices de acné, caída del cabello y acelerar la recuperación en procedimientos estéticos o dermatológicos.
Objetivos Clínicos
Estimular la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico.
Mejora la textura, luminosidad, elasticidad y firmeza de la piel.
Reduce los poros abiertos.
Promover la regeneración celular.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿En qué consiste el procedimiento?
Se realiza extracción de sangre la cual se centrifuga para obtener el PRP y se extraen factores de crecimiento. Luego, se aplica mediante microinyecciones en las áreas a tratar que permiten estimular tanto capas profundas como superficiales de los tejidos.
¿Duele? ¿Cuánto dura?
El procedimiento dura 80 minutos. Puede generar molestias leves, como sensación de pinchazos o ardor temporal. Se utiliza una potente anestesia tópica para mayor comodidad.
¿Cuándo se ven los resultados?
Los efectos comienzan a notarse entre la segunda y cuarta semana después del tratamiento, y se potencian con el paso del tiempo.
¿Cuánto duran los efectos?
La duración de los efectos del Plasma Rico en Plaquetas (PRP) facial puede variar según el estado de la piel, la edad, el estilo de vida y la constancia del tratamiento. Por lo general dura entre 6 a 12 meses.
¿Cuántas sesiones se recomiendan?
Se sugiere un protocolo inicial de 3 sesiones, espaciadas cada 3 a 4 semanas. Posteriormente, se puede realizar mantenimiento cada 6 meses.
Contraindicaciones
- Embarazo o lactancia.
- Enfermedades autoinmunes o infecciosas activas.
- Trastornos de coagulación o anticoagulación.
- Cáncer activo.
Efectos secundarios
Es un tratamiento seguro cuando se realiza correctamente, pero pueden presentarse efectos secundarios leves y transitorios como:
- Enrojecimiento.
- Hinchazón.
- Sensibilidad o mínimos hematomas en la zona tratada.
Cuidados post procedimiento
Evitar exposición solar directa durante 48 horas.
No aplicar maquillaje ni productos irritantes ese mismo día.
No realizar ejercicio intenso en las primeras 24 horas
Mantener una adecuada hidratación de la piel